Sainte Lizaigne
Sainte Lizaigne (Indre), Francia.
La casa amarilla es la de las Srtas. Foerster.


Mamá de inmediato aceptó la oferta de dos hermanas solteras, las señoritas Martha y Helène Förster, las cuales, por compasión, nos brindaron techo en su elegante casa particular en el cercano pueblecito de Sainte Lizaigne, en los alrededores de Issoudun.

La única restricción para mi hermano Ernst (ahora cambiado en el francés Ernest) fue que debíamos mantenernos muy tranquilitos en la tarde, ya que a "les demoiselles" les gustaba oír música clásica sin interrupción alguna; nosotros aprovechábamos esta oportunidad para irnos a correr y a jugar al frente de la casa donde, a corto plazo, hicimos amistades con niños franceses los cuales se han mantenidos amigos hasta la fecha.

Este pueblo se convirtió en nuestra nueva patria y, exactamente como en Becherbach, casi todos los de allí vinieron a conocer a los dos hermanitos de pello rubio, los cuales se lo pasaban corriendo por las calles y los campos, siempre con su nuevo y mejor amigo, "Mousse," el furtivo cazador de aquel sitio.